31 ene 2016

Zika: el virus al que todos temen


Las fotos que muestran los diarios brasileños son impactantes: bebés con la parte de atrás de la cabeza aplastada, como si se las hubieran “rebanado”. Son los rostros del virus que tiene en vilo a los especialistas en salud pública del mundo, y que a todos nos genera terror: el zika. La Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó a una reunión de su comité de emergencia para abordar cómo tratarlo, y los ministros del Mercosur se reúnen esta semana en Montevideo para trazar una estrategia común. Se habla de miles de casos, y de otra seria enfermedad también relacionada con ella. Dicen que todo el continente americano estará afectado. ¿Hasta dónde tenemos que preocuparnos?

En primer lugar, hay que aclarar que en Argentina no hay circulación autóctona del virus. Hubo un caso confirmado, de una paciente que se infectó en Colombia. ¿Esto significa que no va a llegar acá? La OMS alertó queel virus se expandirá por todo el continente americano, por lo cual es de esperar que puedan darse más casos en la Argentina. Además, este verano hubo una importante cantidad de turistas argentinos que viajaron a Brasil, el paísque está viviendo la peor parte de la epidemia.

El zika es un virus que transmite el mismo mosquito que transmite el dengue: el Aedes aegypti. El insecto es además vector de una tercera enfermedad, la fiebre chikungunya. Esta y el dengue no suelen tener complicaciones severas en la mayoría de los casos. Pero el zika, que es un virus relativamente “nuevo” y por eso se conoce poco de él (recién se lo identificó en humanos en Uganda en 1952), está asociado con dos enfermedades complejas. La semana pasada, Margaret Chan, la presidenta de la OMS, dijo que aún no está demostrada la relación con la microcefalia, pero que no lo esperarán para iniciar un plan de ataque: en Brasil hay una epidemia de zika y un brote de microcefalia, con más de 3.500 casos de bebés recién nacidos con esta enfermedad. 

¿En qué consiste la microcefalia? Es una malformación cerebral por la cual el bebé nace con un perímetro craneal inferior al normal, lo que le provocará problemas en el desarrollo y le dejará secuelas para toda la vida. Estos casos se dieron en bebés cuyas madres tuvieron zika durante el primer o segundo trimestre de gestación, no antes.

Ahora, los especialistas están encontrando que el zika se asocia también con otra enfermedad que puede ser muy compleja: el síndrome de Guillain-Barré. A los argentinos esta enfermedad nos suena por el caso de Martín Renzacci, un joven que la contrajo en su luna de miel en Tasmania, yestuvo al borde de la muerte. Su historia, contada en varios medios, hizo conocida esta patología. Según explica en su página web la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, “es un problema de salud grave que ocurre cuando el sistema de defensa del cuerpo (sistema inmunitario) ataca parte del sistema nervioso por error. Esto lleva a que se presente inflamación de nervios que ocasiona debilidad muscular o parálisis y otros síntomas”. El síndrome puede presentarse junto con infecciones virales o bacterianas, por eso preocupa la notificación de casos de Guillain-Barré en regiones donde hay también brote de zika. El gobierno de Venezuela, donde hay 4.500 pacientes sospechosos de zika, confirmó el viernes 255 casos de este síndrome.

 

¿Qué se puede hacer? Primero, obviamente, no entrar en pánico. Las medidas de prevención que puede tomar la población son las mismas que con el dengue, ya que la principal forma de combate contra estas enfermedades es eliminar el Aedes aegypti, el mosquito que las transmite. El Ministerio de Salud, además, recomendó a las mujeres embarazadas que consideren el riesgo antes de viajar a zonas con circulación del virus del zika. Muchas aerolíneas, por ejemplo, están aceptando devolverlos pasajes a las viajeras en estas condiciones.

 

Por otro lado, el ministerio reiteró también cuáles son los síntomas del zika, a los que deberían prestar atención quienes hayan viajado a las zonas de riesgo: fiebre, conjuntivitis no purulenta, dolor de cabeza, dolor de cuerpo y en articulaciones (principalmente manos y pies), decaimiento, sarpullido, e inflamación de miembros inferiores.


Los síntomas duran entre 4 y 7 días. Suelen presentarse de forma moderada o aguda después de un periodo de incubación de 3 a 12 días. Debido a su similitud con los síntomas del dengue y de la fiebre chikungunya, puede ser confundida fácilmente con estas enfermedades. Frente a estos síntomas, no hay que automedicarse (ni siquiera tomar ibuprofeno ni aspirina) y consultar al médico. No obstante, la infección por virus zika también puede ser asintomática.
Foto: Ministerio de Salud de la Nación

 

28 ene 2016

La otra revolución de Barbie



En 1959, Ruth Hendler generó una revolución cuando se le ocurrió crear una muñeca que tuviera el cuerpo de una mujer. Hasta entonces, las niñas sólo jugaban con muñecas que eran bebés u otras niñas. La revolución que planteó Ruth era una muñeca adulta, sexuada, que se metiera en el mundo del trabajo, como las mujeres reales. Se vendrían los 60 y la liberación femenina tenía su juguete: Barbie.

Años después, ese signo de liberación se convirtió en emblema de opresión. La muñeca rubia, alta, flaca, de proporciones imposibles, empezó a ser cuestionada por ese modelo de mujer irreal que estaba transmitiendo a generaciones y generaciones de nenas de todo el mundo.

Mattel, la empresa productora, siempre se defendió de las acusaciones e hizo algunos cambios para mostrar diversidad: Barbies negras, asiáticas, discapacitadas. Hasta que ahora anunció el cambio más radical que haya vivido Barbie en sus casi 60 años. La compañía presentó tres versiones de su muñeca, adaptada a cuerpos reales. Una, la curvy, es rellenita; la tall es alta y, como contrapartida, la petite es más petisa. Diferentes tamaños, como viene la gente real.

¿Por qué recién ahora? Hay que adaptarse al mercado. Los chicos cada vez juegan menos con juguetes y más con el iPod o la tablet, y particularmente Barbie viene perdiendo participación en el negocio, primero a mano de las muñecas al estilo Bratz entre las nenas más grandes y con las de las princesas Disney entre las más pequeñas.

Ahora bien... ¿Qué Barbie le compraremos a nuestras hijas y qué Barbie pedirán ellas? Tenemos la oportunidad de romper los estereotipos de los que tanto nos quejamos y de educar en consecuencia. ¿Iremos a la juguetería a comprar la Barbie gordita y morocha o seguiremos eligiendo a la Pamela Anderson? Ojalá esta sea la segunda revolución de Barbie. Y les enseñe a las nenas a aceptarnos como somos, del mismo modo que les enseñó que una mujer puede ser presidenta o astronauta. 

24 ene 2016

Alerta dengue: cómo usar el repelente


El brote de dengue en el Norte tiene en alerta a todo el país. Las autoridades sanitarias insisten en que la única forma de controlar la enfermedad es con un compromiso activo de la población para eliminar el Aedes aegypti, el mosquito que transmite la enfermedad. En este link del diario Clarín pueden encontrar las 5 recomendaciones para poner en práctica en casa.

Pero hay un ítem que preocupa particularmente a los padres: el repelente. ¿Qué hay que hacer? ¿Hay que embadurnar noche y día a los chicos para que no los piquen los mosquitos? Tomás Newkirk, de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), dice que “no hay que entrar en pánico”. 

“La idea es usar los repelentes que hay en el mercado de acuerdo a la edad pero evitando intoxicarlos o bañarlos en repelente”, explicó el pediatra a la agencia Télam.

¿Cómo usar entonces correctamente el repelente con los más chicos?

  • Tener en cuenta que en general los mosquitos pican más en las horas de la mañana y hacia la noche. 
  • Ponerles el repelente antes de ir a la plaza, a la colonia de vacaciones o cuando están al aire libre.
  • Para los bebés, elegir los que están hechos a base de citronela, que no son tóxicos. Con los más grandes se pueden usar éstos o los productos de marcas más comerciales, teniendo presente que son más fuertes.
  • Por las noches, usar pastillas u otro producto similar para ahuyentar a los insectos. 

El Ministerio de Salud de la Nación recomendó que quienes tienen síntomas de dengue no se automediquen: que no tomen aspirinas o ibuprofeno ni se apliquen inyecciones intramusculares. Lo más conveniente es consultar al médico para que él indique la medicación adecuada. Las señales a las que hay que prestarles atención, en particular si se regresa de una zona donde hay brote (como Misiones, Formosa, Brasil y Paraguay) son:

  • fiebre acompañada de dolor detrás de los ojos, de cabeza, muscular y de articulaciones
  • náuseas y vómitos
  • cansancio intenso
  • aparición de manchas en la piel
  • picazón y sangrado de nariz y encías

Ante estos síntomas se debe acudir al médico.

Foto: Flickr / Departamento de Agricultura de EE.UU.

20 ene 2016

Criar hijas para dirigir el mundo


Chris Sacca es multimillonario. Hizo su fortuna como inversionista en compañías tecnológicas como Twitter o Ubber. Un gladiador de las finanzas en Silicon Valey, un coliseo dominado por hombres donde al talento femenino le cuesta hacerse su lugar, al punto de que hay empresas que les pagan a las mujeres para que posterguen su maternidad para poder hacer carrera.
Sacca también es padre. De tres hijas. Por eso hay que prestarle atención a lo que dice. En esa unión del “mundo-masculino-externo” y el “mundo-femenino-hogareño” que expresa con sus ideas, llama a una reflexión muy interesante sobre cómo criamos a nuestros hijos y cómo nuestra sociedad puede realmente romper la brecha de género. Sacca generó una revolución en las redes planteando que quiere criar a sus hijas como guerreras. En una entrevista con el sitio Mashable, profundizó algunas de esas ideas.
El empresario sostiene que vivimos en una cultura que no cría a las niñas para que sepan sobre finanzas o economía y, del mismo modo, no las estimula a emprender. Lo hacemos de manera deliberada y en apariencia sutil: cita que en un conocido negocio de Estados Unidos, los stickers para niñas son solo de princesas y hadas, mientras que los de niños son solo de carreras y deportes. En coincidencia con lo que dice, creo que conozco una o dos jugueterías donde los juguetes no estén divididos en rosa y celeste.
“Va a llevar un cambio cultural total modificar esto. Como varón, en nuestra cultura estás permanentemente desafiándote”, dice Sacca. Y tiene razón: en los juegos y en las actitudes que promovemos en nuestros hijos, todo el tiempo los estamos desafiando a romper barreras, superar metas, alcanzar objetivos. “No estimulamos los mismos comportamientos en las mujeres”, afirma. Pensemos: como mamás, ¿estimulamos siempre por igual en este sentido a hijos e hijas?
Sacca cuenta que a la mañana, mientras desayunan, ve con sus hijas el comportamiento de las acciones en la bolsa. Si el color es verde, es que están ganando dinero. Si es rojo, están perdiendo y les pregunta qué debería hacer la empresa para dejar de perder. A la noche, las entrena en la negociación, otro arte que a las mujeres no se nos suele dar tan bien en el ámbito laboral (donde muchas veces debemos negociar con jefes hombres). Lo hace con la elección del libro que van a leer antes de ir a dormir. “Les pido que me den un número de libros. Usualmente dicen 10 o un millón. Yo ofrezco solo uno. De ahí negociamos hasta llegar a un número razonable. Quiero que tengan estas habilidades y herramientas porque siento que es algo que no le enseñamos a las chicas”, explica.
Según el empresario, “no tratamos a nuestras hijas como si tuvieran el poder de ser las líderes del mañana y aún dudamos a la hora de promover o apoyar a las mujeres dentro de la industria”.
Creo que no criamos a nuestras hijas para que dirijan el mundo (o no las criamos tan bien como deberíamos) porque nosotras mismas no terminamos de creernos que podemos dirigir el mundo. Seguimos pensando que se necesitan atributos asociados a lo masculino para ocupar posiciones de liderazgo, sin asumir por un lado que si quisiéramos cultivar esos atributos (como la fortaleza) podríamos hacerlo porque no son necesariamente biológicos. Y, por otro lado, no terminamos tampoco de aceptar que las mujeres podemos aportar una sensibilidad quizás sí asociada con la condición biológica del “anidar” de la maternidad que les dé a las organizaciones una mirada diferente, más amplia e innovadora. No nos damos cuenta de que no solo no somos menos que los hombres, sino que hasta quizás tengamos ventajas comparativas sobre ellos.
Son siglos de cultura que hay que poner patas para arriba, pero los cambios a veces pueden acelerarse más de lo que uno cree. ¿Está mal que nuestras hijas jueguen a ser princesas? No: podemos criar princesas que tomen su caballo, salgan a defender su reino y quizás en 30 años sean la CEO de una multinacional. Y también criar campeones que cambien pañales sin vergüenza y puedan lavar los platos. Hay que romper estereotipos, empezando por los nuestros propios.
Foto: Flickr / Amanda Tipton

Esta nota se publicó originalmente en Disney Babble.

Tirar un sweater, tirar un novio


Marie Kondo es una experta japonesa en organización que lleva vendidos cinco millones de libros en el mundo. Asegura que el orden no tiene ningún aspecto negativo y que ordenar nuestra casa es el primer paso para ordenar nuestra vida. En esta nota en Clarín pueden leer la entrevista que le hice vía mail y también ver varios de los videos en los que explica de manera práctica su método: Los consejos de la experta mundial en orden.


11 ene 2016

Cuidarse del sol: un parche mide cuántos rayos recibe la piel



Verano, el momento del año que todos esperamos para tomar sol. Pero esa práctica tiene sus riesgos. Ahora, una novedad tecnológica podría ayudar a minimizarlos: el parche que mide cuántos rayos ultravioleta recibe nuestra piel. 

Fue una de las novedades del sector salud que se presentaron la semana pasada en el Consumer Electronic Show, el CES, la mayor feria de tecnología mundial que se realizó en Las Vegas. El Mi Patch UV es el primer sensor electrónico de este tipo. Es una tira adhesiva transparente que se estira y se adhiere a cualquier zona de la piel que se quiera monitorear. Mide sólo 2,5 centímetros de diámetro y la mitad de un cabello de espesor. Fue desarrollada por el Grupo L'Oreal --la compañía que desarrolló el primer protector solar-- y lo lanzará su marca La Roche-Posay. 


Mi Patch UV, explican en la empresa cosmética, "contiene tintas fotonsensibles que toman en cuenta el tono de piel del usuario y cambia de color cuando se expone a los rayos UV, para indicar los diferentes niveles de exposición". Los usuarios podrán tomar una foto del parche y subirla a una aplicación para analizar la cantidad de radiación que recibieron.

La conciencia del peligro de una exposición solar no controlada es cada vez mayor. Una reciente encuesta local de la consultora Kantar Worldpanel revela que cuatro de cada 10 personas directamente no se expone al sol. De los que toman sol, el 38% usa un protector solar mayor a 30. Sin embargo, todavía es bajo el porcentaje que toma sol sólo en los horarios recomendados: uno de cada cuatro.

La exposición al sol es un factor de riesgo para el cáncer de piel, el tipo más común de cáncer en el ser humano. La Sociedad Argentina de Dermatología da estos consejos para tomar sol sin riesgo:
  • A partir de los seis meses, todas las personas deben utilizar protector solar antes de exponerse. Los menores de un año tienen que estar siempre a la sombra con ropa liviana y sombrero, evitando el sol directo. 
  • Evitar exponerse al sol entre las 10 y las 16.
  • Usar sombrero de ala ancha, anteojos con filtro UV certificado, camisa con mangas largas y ponerse a la sombra de los árboles o una sombrilla.
  • Usar en forma habitual cremas protectoras solares que bloqueen la radiación UVA y UVB, de calidad reconocida y con factor de protección solar (FPS) mayor a 30.
  • Aplicar el protector en toda la piel 20 minutos antes de la exposición y renovarlo cada 2 horas con la piel seca o cada vez que uno sale del agua y se frota o se seca la zona.
  • Usar una cantidad generosa sin olvidar orejas, empeines, labios, cuello, tórax y la pelada en los calvos.
  • No olvidar la protección solar al realizar deportes. 

10 ene 2016

El celular, herramienta para el castigo paterno


El celular es parte de la vida de la mayoría de los adolescentes. Y por eso, también, cada vez más se convirtió en una herramienta de los padres para disciplinar a sus hijos. Eso revela una reciente investigación realizada en Estados Unidos por el Pew Research Center: la mayoría de los padres encuestados castigó a sus hijos dejándolos sin conexión.

La encuesta, realizada a más de 1.000 adultos con hijos de entre 13 y 17 años, muestra que el 82% de los progenitores respondió que su hijo adolescente tiene un celular, el 69% posee cuenta en Facebook y el 29% en Twitter. El 59% de los adultos consultó las llamadas o los mensajes realizados por su hijo. Y el 65% le prohibió usar el celular o conectarse a Internet, como modo de castigo.

Encontrar el equilibrio a la hora de aplicar una sanción a los hijos no es fácil. Como muchas veces tampoco es fácil sostener ese castigo. En el sitio Healthychildren.org, especialistas de la Academia Americana de Pediatría dan algunas pautas generales para disciplinar a los adolescentes:

  • Nunca castigue cuando esté enojado.                 
  • Nunca imponga un castigo que no esté preparado para cumplir. Piense cómo podría responder su hijo. Y pregúntese si podría convivir con los resultados de su reacción. Si la respuesta es no, modere el castigo. No cumplir daña su credibilidad.
  • Las consecuencias de corto plazo (horas para faltas menores o días para faltas mayores) funcionan mejor. La mayoría de los castigos pierden su efectividad si duran más de 24 horas.
  • Castigue a la parte culpable solamente. No haga el castigo extensivo a otros miembros de la familia (por ejemplo, dejando a todos sin  una salida familiar).
  • No utilice la culpa como un medio de disciplina. A menudo no consigue los resultados deseados e incluso cuando funciona, los adolescentes  lo encuentran injusto.
  • Ayude a sus hijos a aprender de sus errores. Para que un adolescente aprenda de sus faltas, primero tiene que reflexionar en lo que hizo y los motivos para hacerlo. Plantear y aclarar el problema, escuchar su versión y ayudarlo o ayudarla a determinar una o más soluciones.  Hay que transmitir dos mensajes: todo problema tiene una solución y sus hijos son responsables de su propia conducta.
  • Imponga disciplina de manera constante. Como regla general, cuando los padres ponen un castigo al azar, están reforzando el comportamiento negativo. La rutina del policía bueno y policía malo puede ser útil para hacer que los criminales confiesen en la televisión, pero es una fórmula que ocasionará problemas si la ponen en práctica las mamás y los papás. No existe una solución simple para esto, además de que se sienten juntos a negociar una lista de límites y consecuencias con las que ambos puedan vivir.
  • En la medida de sus posibilidades, pida la colaboración de otras mamás y papás. Seguramente conoce a varios, si no es que a todos, los padres del círculo de amigos de su hijo adolescente. Quizás un grupo de ustedes esté de acuerdo sobre algunos lineamientos relativamente uniformes sobre temas conflictivos. Pero cualquier cosa que haga, no ceda en los estándares principales de comportamiento que establezca para su hijo o hija. Preste atención al mismo consejo que los padres dieron a sus hijos por generaciones: "Si Juan se tira de un puente, ¿vos también lo harías?"
  • Nunca es tarde para hacer ajustes. Si se es excesivamente estricto (o quizás así lo considera su cónyuge), empiece a cambiar a un punto medio aprendiendo a elegir sus batallas. No es sano ni para los padres ni para los hijos estarse dando constantemente de cabezazos. Para si es demasiado permisivo, recuerde lo siguiente: los chicos necesitan que seamos sus padres primero y sus amigos después.




5 ene 2016

Empecemos una campaña: basta de etiquetas


STodo comenzó hace unas semanas, con una foto de mi compañera blogger Isis Lugo en Instagram. Ella posteó una imagen de unas prendas de vestir de su hija y contó que la pequeña tiene una obsesión con las etiquetas de la ropa. Sentí que no estaba sola en el mundo: que no era una loca y que entendía perfectamente a Isis y a su hija de Isis porque yo, adulta, estoy obsesionada con las etiquetas. Y, claro, mis hijos también.
Luego se sumó al diálogo virtual nuestra colega Dessy Martínez. En dos países separados por miles de kilómetros, ya éramos tres hablando de lo mismo, de cómo molestan las etiquetas de la ropa: #laetiquetamepica, le pusimos como hashtag a la conversación. Empecé a buscar por Internet y me di cuenta de que las etiquetas son un problema para todas las madres del mundo.
Encontré notas enteras en sitios españoles dedicados al tema. En WikiHow explican cómo sacarlas (nada que nosotras no hubiéramos ya probado, pero nos confirman lo que sospechábamos: la que viene cosida directamente con la prenda no se puede retirar). En las redes sociales abundan los comentarios. Algunas bromas me hicieron reír mucho (reír para no llorar). No vamos a nombrar marcas, pero pueden aplicarse a más de una compañía líder (y no tanto):
“Me compré una manta en XX, pero no la uso: me tapo con las etiquetas”.
“Señor XX, si no le importa, envíeme la información en un PDF en vez de poner en los calzoncillos semejante racimo de etiquetas”.
“-Qué original tu bufanda. 
-Es una etiqueta”.
“Esta mañana me compré unos vaqueros de XX y voy a ver si antes de mañana termino de quitar las etiquetas”.
“Lo bueno de XX es que si te compras una camiseta te puedes hacer otras cinco con las etiquetas que lleva cosidas”.
¿Por qué esa necesidad de escribir un tratado cuando lo único que necesitamos saber es si la remera se puede meter en el lavarropas o si el saco precisa un lavado a seco? Los fabricantes dicen que la extensión de la etiqueta tiene que ver con cumplir la normativa que les impone cada país respecto de la información que tienen que dar a sus consumidores. Empresas globales, padecimientos ídem.
La etiqueta me pica, dice el niño y tiene razón. ¿O ustedes nunca se desesperaron, por ejemplo, con una etiqueta en unas bragas que lacera como una lija nuestra cintura? Las que están cosidas con hilo de nylon (el que parece una tanza para pescar) son las peores: más de una vez, en medio de una reunión laboral, sentí que me estaba asesinando, lentamente y sin piedad, un Freddy Krueger que con sus uñas de acero raspaba mi espalda. Era la etiqueta de la camisa.
Empecemos una campaña. Inundemos las redes. Como el “Ice Bucket Challenge”, tirémonos un balde de agua, pongámonos una remera en la cabeza, ¡hagamos algo para despertar las conciencias! A los legisladores que impulsan tantas leyes, les pido por favor que piensen en una reforma que tanto nos aliviaría a las madres: que los fabricantes tengan que imprimir la información fundamental de la prenda (como su talla y su marca) en una serigrafía en un lugar que no se ve, ya hay compañías que lo están haciendo. El resto, que la pongan en una etiqueta de cartón fácilmente extraíble y lo más pequeña posible para cuidar también el planeta.
Si queremos un mundo en el que no haya más etiquetas “simbólicas” que nos cataloguen a las personas, empecemos por abolir las “reales”. Para que ninguna etiqueta más nos pique, nos moleste o nos haga daño.
Esta nota se publicó originalmente en Disney Babble. 

Cinco padres y madres que nos conmovieron



Padres y madres somos protagonistas cotidianos de momentos de emoción. Seguramente cada uno de nosotros tendrá en relación a sus hijos una anécdota o una historia que movilice. En este 2015 que se va, hubo varias de esas historias que trascendieron en los medios y nos hicieron caer una lágrima porque nos identificamos con ellas o porque por diferentes motivos tocaron una fibra de nuestro corazón. Muchísimas más seguro merecerían estar también en este listado de los cinco padres y madres que más nos conmovieron este año.
La larga pelea para ser padres
¿Cuándo es el momento en que se deben bajar los brazos? ¿Qué es lo que te dice “ya está? ¿Hasta dónde hay que seguir intentando cuando lo que buscas es tan esquivo? Arkell Graves y Dana Griffin trataron de ser padres durante 17 años. Esta pareja de Virginia (EE.UU.) hizo todos los intentos, pero ese hijo tan deseado no llegaba: tuvieron cuatro abortos espontáneos y un bebé nació muerto. Hasta que ocurrió el milagro. Ella registró en un video el momento en que él recibe la noticia: le dejó en el horno el pan y la primera ecografía del bebé, que se llamará Kaleb y nacerá en febrero. La alegría y la emoción que expresa ese hombre (“¡Estás embarazada!”, le repite a su mujer antes de largarse a llorar) dan ganas de atravesar la pantalla y ahogarlo en un abrazo.

La unión de dos hermanas
Los retratos que tomó la fotógrafa Allison Rose a las gemelas Dawn y Allison Ardolino son realmente impactantes. En ellos, se ve a Dawn embarazada… del bebé de Allison. “Mi bollo… su horno”, decía el tierno cartel con el que explicaron la situación. Detrás está la historia del profundo amor de estas dos hermanas, que siempre fueron muy unidas e incluso hoy viven a tres cuadras de distancia en el estado de Nueva York. Cuando estaba embarazada de 30 semanas de su primogénito, a Allison le diagnosticaron un cáncer de mama. Pudo tener a su bebé, pero el tratamiento la imposibilitó de volver a ser madre. Y Dawn, que ya había tenido dos hijos, ofreció su vientre para una maternidad subrogada. “Eres mi heroína y nunca he estado más orgullosa de ti. Te mereces una medalla al coraje, la compasión y la abnegación”, le escribió Allison a Dawn después del nacimiento de su hijo Hudson. Un acto de amor fraternal enorme.
Lección en una boda
Todd Bachman nos dio una lección a todos los padres. Su hija Brittany se estaba casando y él la estaba llevando al altar. El padrastro de la chica, que también se llama Todd, observaba la ceremonia como un invitado más, hasta que él dejó a su Brittany, lo fue a buscar e hizo que la novia llegara al altar acompañada por sus dos padres. “Cuando Todd tomó mi mano… fue el mejor día de mi vida y no lo cambiaría por nada del mundo. Nos hemos convertido en una familia y las necesidades de los hijos deben estar primero”, dijo Todd, el padrastro, cuando la foto de Delia D. Blackburn, la fotógrafa de la boda, recorrió el mundo. 
Salvar al hijo de otra
Si tu hijo estuviera en peligro, ¿qué no serías capaz de hacer para salvarlo? Y si el que estuviera en peligro fuera el hijo de otra mujer, ¿harías lo mismo? Sarah Oropeza no lo dudó. Esta madre de dos niños y encargada de una tienda de calzado de Kansas acudió al instante cuando uno de sus empleados entró corriendo para avisar que una nena pequeña había quedado encerrada en un auto en un día de muchísimo calor, con una sensación térmica superior a los 38º. Llamaron a la policía, pero Sarah no pudo esperar: veía a la chiquita sudando y comenzó a golpear la ventanilla con todo lo que tenía al alcance, hasta que logró rescatarla en menos de tres minutos. “Mientras estaba golpeando la ventana, pensaba: ‘¿Qué pasa si ella muere? ¿Si no la puedo sacar? ¿Qué vamos a hacer?’. Yo solo hice lo que creía correcto”, explicó con lágrimas en los ojos cuando la entrevistaron en el programa “Good Morning America”. Solo en 2015, diez niños murieron en Estados Unidos por haber quedado encerrados en autos calientes. Esta pequeña tuvo a su ángel de la guarda, una mamá heroína.

El libro de Marie
Fue la historia que más me movilizó en lo personal. María Vázquez, María Marie‏, como eligió que la conociéramos, era una arquitecta argentina que decidió narrar en su cuenta de Twitter (@kireinatatemono) la batalla que sabía perdida contra el cáncer de ovario. Nos hizo el corazón un ovillo a medida que leíamos su relato descarnado de una enfermedad que no le daba tregua y no pudimos evitar identificarnos con ella, pensar qué haríamos en su lugar. Porque Marie no estaba sola: tenía un marido y un hijo, Nippur, de tres años. 
Como Heather, la estadounidense también enferma de cáncer que escribió postales para que su hija de cuatro años lea cuando ella no esté, Marie tomó un cuaderno y se lo escribió a Nippur. Lo dibujó, lo llenó de colores, le pegó papeles, le escribió a su hijo un libro absolutamente personal y a la vez universal: el relato del amor de una mamá a la que la vida se le va y necesita acompañar a su hijo más allá de su paso en esta tierra (yo estoy convencida de que siempre nuestros padres nos acompañan desde el lugar en el que estén). El cáncer derrotó a Marie en octubre. Un mes después, una editorial publicó su libro, El cuaderno de Nippur, que ya es un éxito de ventas. 

Esta nota se publicó originalmente en Disney Babble Latinoamérica. 

Si el sexo fuera un parto


Varias veces he escrito sobre el derecho que tenemos las mujeres a ser madres como deseamos serlo, sin caer en las presiones por la “medicalización” del parto ni, del mismo modo, por el “fundamentalismo” de lo natural en cuanto a la forma de dar a luz y de amamantar a nuestros hijos. Somos igual de madres si tenemos un parto natural que si tenemos una cesárea, del mismo modo que sidamos la teta o la mamadera.


El parto respetado es un derecho de la mamá y del bebé. Por eso, este video que hizo la filial romana del grupo internacional Freedom forBirth (que promueve justamente el respeto de los derechos en ese momento clave) me pareció genial. Con ironía y humor, a la italiana, llama la atención sobre cómo el sistema medicaliza, a veces excesivamente, el momento del parto. Eneste link del diario Clarín está el video completo, subtitulado en castellano. Y aquí les comparto el original.


Tuve dos cesáreas y no fueron experiencias traumáticas. En la primera había un riesgo para el bebé, mi médica me lo informó y no dudé. En la segunda, también mi médica me planteó que era la mejor alternativa considerando la cesárea previa y el tiempo entre ambos partos, y tampoco dudé. Si volviera a estar en esas situaciones, volvería a decir que sí. La cesárea no me hizo menos mamá, pero estuve contenida y acompañada en ambos partos. Y fundamentalmente, informada. De eso se trata: del derecho de la mujer a estar informada  y a elegir, obviamente dentro de los márgenes que no expongan la salud del bebé.


¿Qué es un parto respetado? Desde el Ministerio de Salud bonaerense, que tienen un programa de maternidades seguras centradas en la familia, explican que lo es cuando cumple estas condiciones:

  • La mujer debe ser informada sobre las intervenciones médicas que pudieran tener lugar durante el proceso de parto, de manera que pueda optar libremente en caso de que existan diferentes alternativas.
  • Debe ser tratada de modo individual y personalizado, en consideración con sus pautas culturales.
  • La embarazada no está enferma. Debe ser considerada como una persona sana, de modo que se facilite su participación como protagonista de su propio parto.
  • Tiene derecho al parto natural, respetuoso de los tiempos biológicos y psicológicos, evitando prácticas invasivas y suministro de medicación si no es estrictamente necesario.
  • Debe ser informada sobre la evolución del parto y el estado de salud de su hijo o hija.
  • Es aconsejable y necesario que esté acompañada por una persona de confianza durante el trabajo departo, el parto y el postparto.
  • Debe tener a su lado al bebé durante la permanencia en el establecimiento sanitario, siempre que el recién nacido no requiera de cuidados especiales.