Cómo crear la contraseña perfecta (y recordarla)‏



Las contraseñas se nos volvieron una pesadilla cotidiana. Lograr contraseñas seguras, diferentes para cada una de nuestras cuentas y que, además, podamos recordar es, al menos para mí, una misión imposible. Y creo que para la mayoría de los seres humanos, también.
Hace pocas semanas asistí a un curso de Google para periodistas. Ahí me di cuenta de que estoy haciendo muchas cosas mal. Tomo muchas precauciones en cuanto a la seguridad "física", pero aprendí que no lo estoy haciendo igual en cuanto a la seguridad virtual. Nos dieron varios tips en el curso interesantes para compartir compartir.
No repetir contraseñas. Es muy difícil que nos vulneren una cuenta de un sitio o una red social importante. Pero si usamos la misma de la cuenta de Facebook para una cuenta de, por ejemplo, un sitio de bricolage que no tiene las mismas condiciones de seguridad, quien acceda a esa cuenta podrá entrar con la misma contraseña, sin problemas, a nuestro perfil. ¿Cómo hacer para tener 20 contraseñas distintas? Sigan leyendo.


Las contraseñas, obviamente, no deben ser datos personales. Pero tampoco palabras o nombres, ni combinaciones del teclado como "qwerty" o "123456".
¿Cómo crear una buena contraseña? El truco que nos dieron en Google es el siguiente: elegir un método, no una contraseña. Ese método lo aplicaremos cada vez que tengamos que crear un nuevo password o que el sistema nos haga renovarlo, algo muy común, por ejemplo, en los correos corporativos. Elegir, por ejemplo, una línea de una canción o de un texto, o el nombre de una película, algo que vayamos a recordar. Tomar las primeras letras e ir modificando la frase para incorporar mayúsculas, números y símbolos. Un ejemplo:
Un misil en mi placard
1n Mi €n Mi Pl
1nMi€nMiPl
Así tenemos una contraseña con una longitud y complejidad adecuadas. Este video de Google explica también el método (está en inglés) a partir de la frase "I like sandwiches":

¿Cómo utilizar esta misma contraseña sin riesgos? Por ejemplo, agregar una referencia al servicio para el que se la usa:
Google: 1nMi€nMiPlGo
Facebook: 1nMi€nMiPlFB
Twitter: 1nMi€nMiPlTw
Y, en el caso de que necesitemos renovarla con frecuencia, se puede agregar un número al final para actualizarla: 1nMi€nMiPl1, 1nM€nMiPl2, 1nMi€nMiPl3 y así sucesivamente. 
Por último, guardar los passwords en un lugar seguro. Si los guardamos en un equipo, ponerle al archivo un nombre poco sospechoso (nunca "mis contraseñas"). Otra opción es utilizar un administrador de contraseñas de confianza. 

Adriana Santagati

Soy periodista desde hace 20 años y mamá desde hace 10. Edito en Clarín Sociedad, soy blogger en Disney Babble y escribo en Ciudad Nueva. En este blog recopilo noticias, consejos, experiencias y reflexiones sobre todo lo que nos atraviesa en nuestra vida cotidiana (y en especial en la maternidad/paternidad).

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